La primera vez que dictó una clase lo hizo solo para dos alumnas. Todavía se acuerda de sus nombres. Tener una relación cercana con sus alumnos es parte del sello de Romina Bustos, secretaria y docente de Obstetricia UNAB, sede Concepción. Si bien solo hace tres años es parte de UNAB, ese breve período, con pandemia de por medio bastó para que sus estudiantes la eligieran como una de los “Docentes que inspiran” 2022.
“Este, sin duda, ha sido mi mayor logro profesional ya que fui premiada por mis estudiantes, ellos me eligieron, ellos se dieron el tiempo de postularme y votar por mí. Claramente esto marcó mi carrera profesional y estoy plenamente feliz por este reconocimiento”, señala.
Fuera del aula, Romina está casada, sin hijos y es una viajera empedernida, catadora de vinos y amante de los animales. Su perro Máximo, un boyero de Berna, así lo acredita.
¿Cómo nació su gusto por la docencia?
“Cuando realicé la beca en ginecología (especialidad) roté con varios ginecólogos que me enseñaban con amor y vocación, por tal motivo, decidí que yo también era capaz de hacerlo y devolver la mano”.
¿Cómo es su relación con los estudiantes?
“Mi relación con las/los estudiantes es maravillosamente integral, de respeto mutuo, confianza, complicidad. Mis estudiantes saben que pueden contar conmigo siempre que me necesiten para sus temas académicos e incluso a veces hasta personales”.
