Eres responsable y te gusta emprender
Siempre sabes cuánto dinero tienes y en qué has gastado. Si eres ordenado y te gusta ahorrar, sabrás que parte de ese patrimonio puede ser útil a la hora de invertir. Tampoco tienes problemas al momento de hacer cuentas y lo disfrutas.
Ese orden y capacidad de ahorro te pueden permitir desarrollar prematuramente una inversión a largo plazo para tu futuro, abriéndote el camino del emprendimiento. Ya sea para asegurar tu futuro, puedes desarrollar una inversión inmobiliaria o bien, levantar tu propio negocio. Los beneficios de llevar cuentas claras están a tu alcance y con visión todo será más sencillo.
Te mantienes siempre informado
Demostrar interés y comprensión por la situación económica y laboral de tu país, así como las diferentes empresas más importantes del mundo es un plus. Consultas el estado los movimientos bursátiles y entiendes de finanzas más allá de la acción. Con una capacidad de comprensión a ese nivel, estarás más que preparado para enfrentar desafíos laborales futuros.
Tienes capacidad y aptitud analítica
Si decides estudiar negocios, tu mente debe estar preparada para tomar decisiones coherentes y rápidas, ya que debes entender analíticamente conceptos ligados a teorías económicas, contables e incluso jurídicas. Mantener un liderazgo es una gran habilidad a la hora de coordinar equipos y plantear soluciones clave en un futuro.
Posees habilidades sociales e ideas innovadoras
Eres una persona que piensa de manera excepcional y eso te da capacidad para resolver problemas y retos de una forma creativa. Ser innovador significa pensar de forma distinta a como siempre se ha hecho, aunque no sólo implica pensar, sino llevar esas ideas a la práctica, lo que te traerá enormes beneficios.
Estudiar una carrera en negocios implica liderar equipos y tratar con diferentes personas durante tu vida profesional. Ser diplomático y empático es clave a la hora de llevar a cabo negociaciones.
Afición por los idiomas
Muchos de los conceptos de negocios proceden del inglés y el conocimiento de este idioma te facilitará las cosas, además de que la mayor parte de la literatura sobre negocios más actualizada, está escrita en esta lengua. Si te interesan los negocios internacionales, deberás estudiar una segunda lengua, aparte del inglés, como mandarín (considerando el crecimiento de los negocios en China), francés o alemán.
Manejar más de una lengua será sinónimo de estatus y profesionalismo a la hora de enfrentarte a nuevos desafíos profesionales y laborales, abriendo un camino más.
¿Sientes que estas características te definen? Entonces no lo pienses más: tienes vocación para estudiar una carrera en negocios. Aunque estas carreras tienen gran demanda, no están saturadas en el mercado laboral en comparación con otras carreras universitarias en Chile, ya que existe una gran variedad de campos donde puedes ejercer.