Valentina Pérez Viñals, estudiante de tercer año en Ingeniería en Administración de Empresas de la Universidad Andrés Bello, tenía ganas de viajar a Europa, pero no sabía cómo y cuándo hacerlo.
Eso hasta que comenzó a averiguar sobre posibilidades de intercambio y convenios para ir a estudiar en el extranjero que entregaba la universidad. Así fue como se propuso avanzar en el proceso hasta que postuló a tres universidades españolas. Y si bien, la primera opción era Madrid, su alegría fue la misma cuando finalmente recibió la carta de aceptación de la Universidad de Alicante, iniciándose de esa forma una experiencia que ella, además de agradecer, recuerda hoy con mucho cariño.
¿Qué aspectos valoras de esta oportunidad?
Muchas cosas. Por ejemplo, haber aprendido a llevar un estilo de vida muy diferente del que estaba acostumbrada, más allá de que hubo días buenos y malos. Además, Alicante me pareció hermosa y me sorprendió mucho, considerando sobre todo que, hasta antes del proceso, no sabía nada acerca de esa ciudad.
¿De qué manera sientes que te aportó?
Valentina Pérez Viñals, fue parte del equipo de Handball de la Universidad de Alicante (abajo, con cintillo).
De muchas formas, sin duda. Como persona y en el aspecto mental, pues me ayudó a ser realmente independiente. En lo profesional, además, debería ayudarme en el futuro, y por cierto en lo deportivo también, pues formé parte del equipo de futsal de la universidad.
Al parecer, te propusiste aprovechar la experiencia.
Así fue, y en eso entendí la importancia de valorar lo que se tiene y a quienes te rodean día a día, también de confiar en mí y en mis capacidades, de abrir la mente y de tener conciencia de que afuera hay un mundo lleno de oportunidades. Así, esa suma de cosas, hicieron además que creciera en mí, mis ganas por seguir viajando y conociendo lugares, de no estar quieta en mi zona de confort.
¿Recuerdas a alguien que haya sido importante en el proceso?
Sí, muy especialmente a Ricardo Lobos (Coordinador de Relaciones Internacionales, Intercambio Outgoing, UNAB) quien siempre me respaldó y estuvo presente, respondiendo mis dudas, dándome útil información, y haciéndome saber que contaba con él. Sin duda, valoré mucho su apoyo.
¿Tienes alguna anécdota que quisieras contar?
Muchas. Quizás no terminaría de contarlas. En lugar de eso, preferiría dar sólo un consejo: si estás en otro país y vas en tren, no te quedes dormido porque puedes llegar a un destino totalmente distinto.